¿Has seguido alguna vez un mapa para dar con un tesoro escondido? Yo sí: en colonias/campamentos y hasta en algunas fiestas de cumpleaños muy curradas. Pero los mapas no solo me han acompañado ahí; también han sido protagonistas en mis juegos y, por supuesto, en mis lecturas.

A día de hoy, cada vez que abro un libro de fantasía y veo un mapa, me quedo unos segundos observándolo; me sale una sonrisa automática ante la promesa de un viaje repleto de aventuras que está a punto de empezar.

Y cuando escribo mis propias historias, me pasa lo mismo. Necesito un mapa. A veces lo dibujo a mano (queda cutrecillo, pero lo disfruto), otras tiro de Photoshop… y últimamente estoy usando generadores que para mí mezclan muy bien facilidad y personalización.

Así que, tanto si estás creando un mundo para tu novela como si simplemente te apetece jugar a inventar reinos, quédate por aquí. Hoy te cuento mi nueva forma favorita de hacer mapas.

Dibujar tu mapa con Inkarnate

Inkarnate es mi generador/herramienta favorita para mapas. Te permite ir construyendo tu mundo poco a poco, personalizando casi todo lo que te apetezca a través de una interfaz muy cómoda e intuitiva. Tiene una versión gratuita y una premium. Por el momento, yo siempre he usado la gratuita y he tenido suficiente.

Lo primero: cuando entras a su plataforma, tienes que elegir el tipo de mapa a crear. Si, como yo, lo que quieres es un mapa general de todo el mundo, te recomiendo la opción de Fantasy World: Free

Una vez en la pantalla para crear tu mapa ya puedes empezar a curiosear y trastear entre las herramientas que te Inkarnate te ofrece.

El icono de la pala es para crear terreno. También puedes eliminar terreno en el mismo icono pulsando sobre “substract” y así crear ríos. Yo lo que hago es primero dibujar toda la tierra, después colocar las montañas y desde ellas llevar ríos al mar borrando (sustrayendo) tierra.

Para crear montañas, poblados, bosques y otros elementos podéis hacerlo desde el icono de la torre de castillo.

Para dar color a la tierra, desde el icono del pincel, y para mover el mapa desde la flecha. Realmente es bastante intuitivo, así que explora un poco las distintas opciones que te ofrece hasta que te resulte cómodo.

Otras opciones para crear tu mapa de fantasía

Si Inkarnate no te convence, recuerda que tienes otro montón de opciones, desde dibujarlo a mano, hasta usar programas potentísimos (aunque con dificultad de aprendizaje) como Photoshop o GIMP. Con ellos puedes elegir absolutamente todo, desde el tipo de árbol a las formas de la montaña, o los tonos del mar… Photoshop es más potente que GIMP, pero también más complicado.

Y si te ha gustado la idea del generador, pero no te convence Inkarnate, ahora te menciono otros varios para que explores a placer: mewo2, AzgaarbFantasy Map Generator, Donjon y Watabou.

¡Espero que disfrutes creando!