
El color del hierro
Idae Ros
Shona y Kolpa son dos enanas del clan del Hierro y, como tal, su futuro debería estar junto a la forja. Sin embargo, su pasión es otra muy distinta: la pintura.
Ambas amigas están dispuestas a hacer lo que sea para seguir con sus sueños, aunque eso implique enfrentarse solas a los humanos, salir de viaje para vender los pigmentos que crean o aguantar las burlas de los otros miembros del clan.
Lo que ninguna esperaba es que Kolpa no regresara de su viaje, y que Shona tuviera que salir sola a buscarla, enfrentándose a un mundo desconocido, peligroso y hermoso donde su vida y, lo que es peor, la de esa amiga por la que alberga fuertes sentimientos, estarán en peligro.